El objetivo principal consiste en mejorar el monitoreo del cambio climático, para evitar posibles futuros desastres naturales. Para ello China y la Unión Europea (integrada por 27 países; entre ellos: Austria, Bélgica, Bulgaria, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Portugal, España, Reino Unido, etc.) sumarán esfuerzos.
Durante la conferencia «Abracemos el espacio», celebrada en el pabellón de la Union Europea en la feria World Expo en Shangai, uno de los especialistas afirmo que la contaminación del aire es un problema común que el mundo entero debe combatir y que requiere un seguimiento constante.
Ya existen planes para que el Ministerio de Ciencia y Tecnología de China y la Agencia Espacial Europea lanzarán el proyecto «Dragoness». Esto representa el mayor proyecto internacional en el campo del seguimiento y monitoreo de la Tierra. Es una iniciativa que promete una ardua tarea en conjunto, mediante intercambio de especialistas y entrenamiento tecnológico por parte de ambas entidades.
China al parecer posee recursos con los que la Unión Europea no cuenta: en especial el lanzamiento de satélites a la órbita terrestre. Sin embargo, ambas partes están en mutuo acuerdo para compartir el conocimiento del espacio y la tecnología.
Estos acuerdos, tienen el principal objetivo de estudiar los procesos en los cambios climáticos y elaborar informes y planes para una protección ambiental y posibles alertas para prevenir catástrofes naturales como los ya trágicamente ocurridos en las costas del Atlántico en el 2005 (Huracan Katrina) o el devastador terremoto ocurrido en la isla de Haití en los comienzos del 2010.
También se espera que los resultados del trabajo en conjunto permitan elaborar políticas de contención en relación al gas carbónico